





En el número 18 de la Calle de Echegaray se esconde un secreto, un pasadizo que lleva a otro mundo. A primera vista, nada parece indicar que detrás del mostrador de una antigua botillería del siglo XIX se oculta una puerta secreta. Pero aquellos que conocen la clave saben que, al cruzarla, todo cambia. Cada 365 días, cuando el cronómetro de la fachada llega a cero, un nuevo destino toma el control, envolviendo cada rincón del local con la esencia de un país distinto. Tras un año sumergido en la penumbra de la selva colombiana, Calle 365 ha vuelto a cambiar su piel. Como dicta la tradición, la brújula ha girado y el telón se ha corrido para revelar un nuevo país inexplorado.
La puerta secreta ahora conduce a las entrañas de Brasil
Al
cruzar la puerta, el visitante se
sumerge en un universo de
400 metros cuadrados, donde las
paredes grafiteadas, la
penumbra
y el neón
transforman la noche en una
celebración perpetua. Un
viaje sensorial que
despierta los sentidos y
transporta al
Brasil más vibrante y excéntrico. Desde las alturas, el
imponente Cristo Redentor
observa con
majestuosidad y
solemnidad
gran parte del local, marcando el
inicio de un recorrido donde
cada detalle exige ser explorado. El
primer punto
de encuentro es un
photomatón enmarcado por un
mural de las icónicas cintitas de Bonfim, acompañado de
plumas rescatadas de los
carnavales más auténticos. Más adelante, una
pasarela recrea un sambódromo,
escoltada por murales grafiteados de
personajes emblemáticos y la
inquietante silueta de una
serpiente
que parece
emerger de las sombras. Las
barras de coctelería
deslumbran con su
revestimiento inspirado en la
Escalera de Selarón, donde
cientos de azulejos de colores y
formas
diversas
rinden tributo
a esta
joya arquitectónica de
Río de Janeiro. Sobrevolando el escenario,
esculturas de aves de la película
Río
vigilan el camino hacia el
Caipirinha Bar, un
cocktail truck transformado en una
icónica Volkswagen "Samba", donde el
combinado más representativo de
Brasil fluye sin cesar. En la penumbra, un último rincón aguarda: una
cabina de DJ que recrea la
majestuosidad de una carroza
de
carnaval y un área dedicada a las
coloridas fachadas de los pintorescos pueblos brasileños.
La magia de los tragos y la búsqueda incansable del factor sorpresa
Alexis Velixar,
Head Bartender de
Rosi La Loca World, ha
reinventado la propuesta líquida con el fin de
capturar la calidez y
exotismo de
Brasil. Este, se moja y confía especialmente en
dos cócteles estrella: Sexo Na Praia y
Pitaya,
"Son tragos fáciles de amar y difíciles de olvidar", afirma
Alexis.
Sexo Na Praia mezcla
Brugal Añejo,
licor de melocotón,
puré de mango,
arándano y
lima.
Pitaya sorprende con
José Cuervo,
Juniper Pera,
sirope de chicle y
puré de fruta del dragón.
"No solo sorprenden por el sorbo, sino también por la vajilla que los envuelve, la cual, año tras año, se convierte en objeto de devoción". Diseñados por el referente
José Piñero, sus
vasos y
soportes atrevidos han despertado tal afán que se han
activado alarmas para
evitar su desaparición.
Pero el
viaje no termina en la copa. Entre los muros de este refugio, cada noche se convierte en una
aventura por resolver. La programación de
actividades está pensada para quienes
buscan lo inesperado:
clases de samba, representaciones del carnaval,
espectáculos con una puesta en escena desorbitada y
personajes brasileños que, como
maestros de ceremonia poco convencionales,
rompen con todo lo esperado. Y para quienes desean darle una
vuelta de tuerca al domingo, su
tardeo se convierte en una
cita muito suculenta. Desde las
16:00, la
música en directo y un
sinfín de sorpresas transforman las últimas horas del fin de semana en un
carnaval continuo. Además, para quienes buscan una
experiencia corporativa diferencial, sin necesidad de
billetes ni pasaporte, existen
opciones disponibles a partir de
100 personas.
Calle 365, sello inconfundible de Rosi La Loca World
Calle 365 forma parte de la familia Rosi La Loca World, el grupo de restauración que ha hecho de la capital su
lienzo de creatividad. Fiel a su pasión por el
Barrio de las Letras, el grupo, que engloba
Bestial by Rosi La Loca,
Rosi La Loca,
Inclán Brutal Bar,
Lovo Bar y
Boom Boom Ciao (este último ubicado excepcionalmente en
Malasaña), ha convertido cada uno de sus espacios en
recuerdos inolvidables. En cada uno de sus locales, la
búsqueda de las experiencias
de
ocio democratizadas y la
entrega del
equipo son innegociables. Aquí, la
hospitalidad y la
empatía son norma de la casa. Pero este
speakeasy no solo viaja, también deja
huella en el camino. Como cada año,
Calle 365 reafirma su
compromiso con las
tierras que visita y
destinará el 1% de sus
ventas a una
fundación vinculada a Colombia, el país que deja atrás.
De México a Brasil, pasando por India y Colombia: un viaje con historia
El
alma de Calle 365 radica en la
historia de
Margarita Poblet, la mujer que
transformó su trastienda en un
portal hacia los
destinos donde se
ocultaba su esposo Guillermo.
Cada 365 días, una
carta llegaba a sus manos,
relatándole con minuciosidad las
calles de la ciudad que lo acogía. Cada
365 días,
Margarita convertía esas
palabras en realidad dentro de su
speakeasy. Así,
México irrumpió
con el
eco de mariachis.
India hipnotizó con
danzas envolventes.
Colombia encendió el
ritmo con la
fuerza de la cumbia. Ahora, el mensaje la ha llevado hasta
Brasil, un país donde la
noche nunca duerme y
cada esquina late al
ritmo de la
samba. Sin embargo, la gran
incógnita es:
¿dónde se esconde Guillermo ahora?
¿Qué ubicación dictará el próximo giro de este clandestino? Como siempre, solo el
tiempo lo dirá.
La
puerta se ha abierto. Brasil aguarda.
¿Quién se atreve a descubrirlo?
El
cronómetro ha vuelto a marcar su primer segundo. La
cuenta atrás ha comenzado.
Brasil espera, pero no lo hará para siempre. Solo hay
365 días para vivirlo. Quienes lo
descubran, quedarán
atrapados en su embrujo. Las
reglas son simples:
entrar,
dejarse llevar y
no revelar lo que
sucede en
Calle 365.
Fuente:
FILIPPA BY INDIE
https://calle365madrid.com/